Para ayudar a los progenitores, Cunha sugiere un acompañamiento desde “el cariño y el respeto” y evitar emplear esas oraciones cliché que daño les puede llevar a cabo. También, opina que sería favorable que permanezca la opción de una baja temporal a fin de que los progenitores logren pasar su duelo, sea cual sea el instante en el que se causó la pérdida así como reclamaba la activista Claudia Gómez, en un reportaje con MagasIN. “Imagínate a una mujer a la que le toca parir un bebé formado y pasar por un parto inducido las ganas que tiene la posibilidad de tener de regresar al trabajo de súbito, sin tripa, que le pregunten qué tal su niño o su pequeña… Aparte del tiempo que necesitas a nivel físico”.
En los dos casos los progenitores y los profesionales se enfrentan a una situación que podría considerarse de duelo anticipatorio dada la gravedad y peligro de muerte del bebé. Por una parte desarrollan la pérdida del bebé sano fantaseado y, por otro, adelantan la viable pérdida por muerte del bebé real. Se discuten entre el apego al bebé enfermo y el miedo a que no consigua sobrevivir. Esta ambivalencia puede manifestarse por la distancia sensible e inclusive física del bebé o por una constante presencia y alerta por todo lo que sucede con su hijo. Su historia diaria está condicionada por las visitas hospitalarias y la evolución del estado del niño. La situación puede llegar al punto de desear que el bebé muera y de este modo acabar con el sufrimiento de todos, si bien ese pensamiento conlleva un intenso sentimiento de culpa.
Reestructurar La Pareja
De esta manera, se obtiene el consuelo de los conocidos cercanos de una forma explícito. Este es un aspecto vital en el duelo perinatal ya que no se han tenido vivencias con el bebé fuera del vientre materno, y muchas veces no se ha visto el cuerpo tras el parto. De ahí la recomendación de ver al bebé tras el parto, mantenerlo y despedirse de él. Estamos trabajando por realizar un mundo mejor, ayudando a los padres a construir momentos memorables con sus hijos.
Para remediar su pena se recomendaba a los progenitores olvidar lo sucedido y buscar un nuevo embarazo lo antes posible. Es muy común oír a nuestras abuelas charlar sobre sus hijos no natos gracias a abortos espontáneos, pero actualmente es raro sacar este tema en una charla entre amigas o conocidas. Sabiendo el elevado porcentaje de abortos naturales, ¿por qué razón existe un silencio popular cerca de estos hechos? Como sucede como con el suicidio, nuestro alrededor no suele estar preparado para encararlo, así que se evita hablar de esto y se silencia como si nunca hubiese pasado.
Es Esencial No Bloquear Ni Ningunear Las Conmuevas
Es esencial que puedas charlar con personas de confianza sobre cómo te hallas y quizá poder señalar que no precisas consejos, solamente ser escuchada. El desafío es un desarrollo que precisa tiempo para lograr elaborarlo, es habitual lo que comentas en relación a las sensaciones y el estado emocional en que te hallas. No por el hecho de que me sienta cómoda, sino pues creo que es esencial para todas las mujeres oír.
Ese mal irá reduciendo, pero de momento es tal como tiene que ser. Denominamos desafío perinatal al desafío que se experimenta tras la muerte de un hijo, cuando el fallecimiento se produce durante el periodo de tiempo que va desde la concepción hasta el primer año de vida. Si la mujer desea volver a quedarse embarazada tras la pérdida, la doctora Baviera asegura que hay que aguardar a la siguiente regla en el caso de un aborto en el que no haya habido complicaciones, y una cuarentena cuando se trata de una muerte perinatal en la que ha habido un parto. No obstante, el tiempo para recuperarse emotivamente de la pérdida es distinto.
Las personas con su buena intención, procuran animar a la madre, mencionarle que no pasa nada, que próximamente tendrá un nuevo bebé, pero eso no es lo que precisa oír en esos momentos. Pero no sólo el inconveniente viene por la parte de la sociedad, también por la parte de los propios expertos de la salud. Aunque no hay acuerdo acerca de cuándo acaba el proceso de desafío perinatal, hay autores que aseguran que puede perdurar de dos a 4 años, si bien al cabo de seis meses-un año del hecho por el momento no frecuenta constituir el centro de la vida sensible de los padres. Terminar un embarazo por intención propia asimismo puede desatar una reacción de duelo que recibe una creciente atención en la literatura.
Y aunque la depresión pertence a las complicaciones probables del desafío , no debe diagnosticarse a menos que los síntomas se contengan un par de meses después de la pérdida. Sería útil tener una definición más precisa o con instrumentos de medida correctos para apreciar el duelo transversal y longitudinalmente, pero las herramientas diseñadas se han con limite a la investigación clínica (diez-12). Este artículo pretende poner énfasis la realidad del desafío perinatal, que como el duelo por otras personas queridas, desata un padecimiento psicológico y puede complicarse transformando la presencia de los progenitores sin hijo en una experiencia difícil de sobrellevar. El aspecto primordial que caracteriza a este tipo de pérdidas es que se tiende a quitarles importancia, o son silenciadas por la parte del ambiente, en el momento en que de todos modos son tan dolorosas como cualquier otra. Tal es así, que suelen encuadrarse dentro de los llamados “duelos silenciados o desautorizados”.
La reducción permite un mejor resultado del embarazo que, de haber continuado, podría haber acabado con prematuridad extrema, discapacidad severa o la desaparición de todos y cada uno de los fetos. Solamente se han estudiado las secuelas psicológicas para la pareja y menos aun para los hijos sobrevivientes. Además de por la pena, el dolor crece por la incomprensión y soledad pues la mayoría lleva lo ocurrido en misterio, sin dar explicaciones a su ambiente para eludir ser enjuiciados. Aunque varios progenitores no padecen una pena prolongada un tercio de ellos presenta una depresión moderada y no pocas mujeres recuerdan la intervención como atemorizante, muy estresante y causante de mal emocional. Muchas parejas se preguntan de qué forma habrían sido los hijos que no llegaron a gestar, de qué manera se hubieran arreglado de haber tenido trillizos, o si los supervivientes echarán de menos durante su vida al hermano con quien compartieron útero.
Entra a nuestra página y descarga estas que son las más bellas imágenes de pésame por la muerte de un bebe, pues te ayudaran a expresar tu dolor. Se puede realizar a solas, en compañía de la pareja y demás hijos o con todas y cada una la gente que se sienta puedan acompañar. El ritual de despedida puede repetirse en las datas importantes, por año de la pérdida, en la fecha donde hubiera nacido o en el aniversario de esta por medio de una liturgia de conmemoración o recuerdo. También ayuda a empezar a transitar los sentimientos de tristeza, rabia, impotencia, amor o culpa. Entendemos que la desaparición perinatal es una situación que hoy en dia está empezando a ser visibilizada, pero que durante siglos fué silenciada y la expresión de su dolor incluso censurada. Gracias por mencionar la pérdida y el duelo en el aborto voluntario.